La belleza de un Ginkgo Biloba en otoño
el amarillo radiante que me hace bajar
sentir el aire
y pensar que todos mis problemas son una gilada.
"Que lindo es un abrazo en la oscuridad"
dijo
no pude responder,
me quedé muda
como si hubiese visto a Dios.



perderme en tus grietas
hundirme en tus pliegues
temer frente al abismo

te extraño
aunque ahora pueda recostarme sobre otro pecho
te extraño.
Hay algunas cosas que te cuestan decir
hay algunas cosas que me cuestan decir

nos banco a muerte.
Hay poemas que no me pertenecen
son de mi gata
de alguna planta
del cielo
del viento...

hay poemas que no me pertenecen
son tuyos
tomá
tenelos
agarralos
son tuyos.
Me siento como un ombú
con las raíces expuestas.
Decirle un secreto a un caracol
y arrojarlo nuevamente al mar
que quede resonando
como un eco eterno
perdido
hasta que alguien lo encuentre
lo lleve a su oído
y me descubra.
No puedo diseñar una estrategia para salir de este estado
necesito algo que me ate al presente
como sogas que me amarren a mi misma
que me aten a mi historia
que me mantengan unida

que me desarmo! que me desarmo!

no voy a sobrevivir a un intento más.
Si no me salva la poesía que no me salve nada.
Imaginé múltiples escenarios
ninguno contemplaba la posibilidad de semejante ausencia

¿ingenua, romántica, (in)segura, boluda?
demasiado todo
demasiado todo
¿qué voy a hacer con todas las cosas a las que les puse "me gusta" cuando no me quieras más?
el calor  y el placer
de la rabia y la alegría organizadas
me hacen mojar la bombacha
Se ve que me siento invadida
bombardeada
conquistada
lo que supo ser mi territorio,
mi cuerpo tembloroso y deseante,
es menos mio
me da miedo
pero se siente bien desprenderse de la propiedad privada.
Pensé en zambullirme en tu vida como si fuese una pileta de colonia de vacaciones eterna soleada
pero desierta
nuestro mundo pensé.
La tristeza de miles de balcones sin plantas.