Domingo

¿Será una condición inherente a los domingos estar sensible?
Ver una película medio mala, medio depre para llorar un rato, llorar con un poema, con un cuento, con un vídeo, con una nota en el diario... en fin el punto es llorar un rato.
Nos ponemos nostálgicas y nostálgicos. Recordamos historias superadas, innecesarias, buscamos la excusa para mantener el estado depresivo, para que se nos caigan aunque sea un par de lágrimas, porque sino no es domingo.
Un factor a considerar podría ser la resaca, lo que queda de la noche del sábado, la angustia por el desencuentro, alguna que otra culpa (que nunca está de más, y siempre hay forma de que aparezca, porque si no es por haber salido, es por no haber salido, por coger, por no coger, por mirar una película, por no estudiar, por dormir, por comer), dormir poco o dormir mucho, ambas cosas nos tiran para abajo y hacen que sacarse el pijama (que en mi caso es la ropa que encontré cuando me levante) sea una tarea prácticamente imposible a menos que el hambre y/o la gula sea más fuerte y nos lleven a hacer un intento de cambiarnos para salir a comprar.
Y cuando te querés dar cuenta se hizo de noche y no entendés que mierda paso con el día, a dónde se fue, o que mierda hiciste vos en todo el día que estás exactamente igual que hace 12 horas.